21 de Diciembre.

No es bueno tener miedo a la muerte, pero tampoco es bueno retarla.
Exprime cada minuto de tu vida, pero no lo hagas de forma extrema, se prudente pero a la vez diviértete, se alegre y disfruta, porque solo las personas que han estado a punto de perder la vida son las que la aprecian, y eso no tiene porque ser así. 
Agradece todo, hasta lo malo, porque ha habido muchas personas que no han podido sufrir, y si lo han hecho ha sido esperando su día, por lo que hay que estar agradecido por cada segundo que te regala la vida.
Saber vivir no es cuestión de miedo, tener el miedo a que te pase algo no te hace vivir mas, hay que vivir con cabeza, pensar las cosas antes de hacerlas, porque muchas veces la espontaneidad nos cobra factura.
Nunca sabrás cuando es tu último día, esto es como una carrera extrema que no tiene final, habrá peajes que te hagan pagar las trampas que has cometido durante la carrera, habrá paradas de descanso cuando te esfuerces lo suficiente como para conseguirlas, y muchas veces la carretera recta kilométrica por la que corres tendrá bifurcaciones, en algunas los carteles cercanos te avisaran de los desvíos por lo que puedes meditar que decisión tomar, pero en otros será cuestión de segundos.
La vida para mi es una carrera a contrarreloj en la que siempre quiero quedar ganadora.